Gestión integral de contraseñas
Cuando se crean y gestionan contraseñas para empleados, los hábitos seguros en materia de contraseñas se convierten en la norma.
Automatice las tareas relacionadas con contraseñas
LastPass se encarga de crear, recordar y rellenar las contraseñas, para que los empleados puedan centrarse en el trabajo real.

Inicie sesión una vez y listos
Los empleados no tendrán que escribir ni recordar sus contraseñas. LastPass guarda y completa sus datos de inicio de sesión cuando trabajan.
Generación de contraseñas seguras
El generador de contraseñas crea una nueva contraseña segura y aleatoria en el momento.
Comparta contraseñas sin esfuerzo
Los miembros del equipo pueden compartir contraseñas con comodidad, sin recurrir a opciones poco seguras como el correo electrónico o el chat.
Una bóveda para cada empleado
Simplifique las cosas para los empleados con un solo lugar en el que almacenar y encontrar todas las contraseñas.

Una contraseña maestra
Proporcione a los usuarios lo que realmente quieren: recordar una sola contraseña que desbloquee el acceso al resto de sus sitios web y aplicaciones.
Acceda a sus contraseñas desde cualquier sitio
No importa si se trata de un equipo de escritorio, portátil, smartphone o tablet, su cuenta se guardará y sincronizará donde la necesite.
Millones de usuarios
LastPass es el gestor de contraseñas elegido por millones de personas, y a sus empleados también les encantará.
Seguridad en el trabajo y en la vida personal
Los empleados pueden vincular una bóveda de LastPass personal con su bóveda de trabajo para organizar la contraseñas en el lugar adecuado.
Dos bóvedas vinculadas de forma segura
Los empleados pueden vincular una bóveda personal a su bóveda de trabajo para disfrutar de un acceso cómodo a todas sus contraseñas al tiempo que el equipo de TI conserva el control de las credenciales corporativas.
Ordene las contraseñas en la bóveda correcta
Cuando los empleados se registran en nuevos servicios, LastPass coloca automáticamente las contraseñas en el lugar correcto. Cuando dejan la empresa, solo se llevan las contraseñas personales.
